viernes , 29 marzo 2024

18 aniversario de la Primavera Negra de Cuba

Miami (CS) – Hoy se cumplen 18 años de la Primavera Negra de 2003. Un total de setenta y cinco disidentes y opositores fuimos encarcelados y sentenciados en juicios sumarios el siguiente mes a penas de cárcel que oscilaron entre 6 y 28 años de privación de libertad.

Los arrestos ocurridos durante los días 18, 19 y 20 de marzo del año 2003 intentaban liquidar a los que pensaban diferente y a la vez se enfrentaban a la dictadura. El conjunto de los encarcelados se conoce como el Grupo de los 75.

Ante el creciente auge del movimiento contestatario dentro de la Isla, la dictadura optó por la represión. El objetivo principal era aterrorizar al pueblo cubano. Debido al progreso alcanzado por estos grupos, y aprovechando el inicio de la guerra de Irak, lanzó el mayor acto de represión visto contra la emergente sociedad civil cubana.

El régimen castrista se valió del inicio de la guerra en Irak creyendo que la opinión pública internacional no atendería los atropellos cometidos en Cuba. Esta suposición fracasó totalmente, ya que, como nunca antes, amplios sectores de la opinión pública mundial, incluidos algunos que por muchos años fueron engañados sobre la realidad cubana y la apoyaban, comprendieron la verdadera cara del régimen de La Habana y la trágica situación imperante en Cuba.

Durante tres días, cientos de agentes del Departamento de Seguridad del Estado (la policía de pensamiento castrista) a lo largo de todo el país y de forma sincronizada allanaron un centenar de hogares, interrogaron a sus moradores, confiscaron sus obsoletas máquinas de escribir, radios, grabadoras, cámaras fotográficas, fotos, libros, revistas, periódicos, folletos, declaraciones de Derechos Humanos, bolígrafos, hojas en blancos, y material de oficina entre otros, para finalmente detener a los líderes contestatarios.

Entre los arrestados por las fuerzas represivas del régimen castrista se encontraban periodistas, sindicalistas, economistas, médicos, bibliotecarios, maestros independientes, activistas prodemocracia, así como líderes de organizaciones políticas.

Tras unas dos semanas de intensos interrogatorios en los centros de la Seguridad del Estado en toda la isla, tales como Villa Marista en La Habana, se realizaron los juicios sumarísimos sin garantías procesales.

Del 3 al 7 de abril setenta y cinco inocentes fuimos procesados e injustamente condenados, la mayoría, un 65%, a más de 20 años. Solo por escribir y hablar exigiendo libertad y democracia.

La reconocida organización internacional Amnistía Internacional (AI) declaró a todos los juzgados prisioneros de conciencia.

Como siempre, los sicarios castristas defendieron la ola de represión alegando que era una reacción necesaria a las agresiones de los Estados Unidos de América contra la Isla. Después de concebir toda una base legal para justificar las sentencias, declararon al Grupo de los 75 culpable en virtud del Artículo 91 del Código Penal –“el que, en interés de un Estado extranjero, ejecute un hecho con el objeto de que sufra detrimento la independencia del Estado cubano o la integridad de su territorio, incurre en sanción de privación de libertad de diez a veinte años o muerte”– y de la Ley No. 88 de Protección de la Independencia Nacional y la Economía conocida como “Ley Mordaza”.

El castigo al Grupo de los 75 se hizo extensivo a sus familiares, pues la bien calculada lejanía de las prisiones incrementaba el sacrificio que tenían que realizar para mantenerse en contacto con los confinados. Pero la reacción de las madres, esposas, hijas, hermanas y familiares no se hizo esperar; esa ola de arrestos y juicios sumarios condujeron al nacimiento de un movimiento cívico contestatario conocido como las Damas de Blanco, lideradas por la emblemática hoy fallecida Laura Pollán Toledo.

Muy alentador resultó que en todo momento contamos con el apoyo de AI, Human Rights Watch (HRW), el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ), Reporteros sin Fronteras (RSF), Organización Internacional del Trabajo (OIT), PEN Club Internacional, Pax Christi International y otras ONGs de defensa de los derechos humanos.

También nos reconfortó la Carta Abierta contra la Represión en Cuba, que manifestaba que el gobierno de Fidel Castro “ha desatado la más violenta represión política de los últimos diez años en Cuba (…) Los abajo firmantes, intelectuales, artistas y políticos del mundo democrático, exigimos al gobierno cubano la inmediata liberación de todos los disidentes que desean la soberanía y la democracia de su país, y demandamos el cese de la represión contra la oposición pacífica”.

Esa carta fue rubricada por cientos de intelectuales, artistas, periodistas y políticos de origen cubano y de todo el mundo, auspiciada por la Asociación Encuentro de la Cultura Cubana, entre los firmantes figuran:

Los cantantes Ana Belén, Soledad Bravo, Maurice Reverdy, Víctor Manuel, Caetano Veloso, Joaquín Sabina y Alejandro Sanz; las actrices Penélope Cruz, Aurora Bautista y Rosa María Sardá; los cineastas Pedro Almodóvar, Patricia Bardon, Jean-Jacques Beinei, Montxo Armendáriz Barrios, Agustín Díaz Yanes, David y Fernando Trueba; los escritores Günter Grass, escritor alemán, Premio Nobel, Jorge Semprún, escritor, ex Ministro de Cultura de España, Hans Magnus Enzensberger, escritor alemán, Premio Príncipe de Asturias, Jorge Edwards, escritor chileno, Premio Cervantes Sergio Ramírez, escritor, ex vicepresidente de Nicaragua, Rosa Montero, Maruja Torres, Elvira Lindo, Almudena Grandes, los hermanos Juan y Luis Goytisolo, Antonio Elorza, Elizabeth Burgos y Carlos Monsiváis, Carlos Solchaga, economista y político, ex Ministro de Economía y Hacienda de España (PSOE) y Manuel Chaves González, Presidente de la Junta de Andalucía (PSOE).

Al mismo tiempo sirvió de sustento el apoyo moral recibido en la Iglesia de Santa Rita de Casia, en La Habana, a nuestras mujeres, quienes unidas pronto llegaron a ser conocidas internacionalmente como las Damas de Blanco de Cuba.

Hasta el momento 11 de nosotros se han marchado sin ver nuestra Cuba libre. Ellos son:  Miguel Valdés Tamayo (01-11-2007), Oscar Espinosa Chepe (09-23-2013), Antonio Villareal Acosta (12-28-2013), Arnaldo Ramos Lauzerique (11-03-2016), Jorge Luis González Tanquero (11-28-2016), Arturo Pérez de Alejo Rodríguez (01-25-2017), Omar Pernet Hernández (10-07-2017), Julio Cesar Gálvez Rodríguez (04-18-2018), José Gabriel Ramón Castillo (07-16-2018), Orlando Fundora Álvarez (11-24-2020) y Carmelo Díaz Fernández (02-07-2021).

También debemos recordar a Orlando Zapata Tamayo, quien, aunque no formó parte de los 75, sí fue arrestado junto con un grupo de nosotros el 20 de marzo de 2003 y al año siguiente fue condenado a tres años de privación de libertad por “desacato”, “desórdenes públicos” y “resistencia”. Después de varios juicios adicionales estaba cumpliendo una condena total de 36 años de prisión en el momento de su asesinato el 23 de febrero del 2010, después de perpetrar una huelga de hambre de 86 días, solo por el mero hecho de pretender mejores condiciones carcelarias en la prisión donde cumplía su injusta pena. El ayuno era la única manera que tenía para exigir sus derechos como ser humano en las cárceles del castrismo, cementerios de mujeres y hombres vivos.

Ellos forman parte de la historia de nuestra Patria, esa que habrá que enseñar a las generaciones que han vivido durante más de 62 años en la penumbra que genera esta dictadura criminal. Esperemos que pronto se logre la libertad por la que han muerto cientos de valerosos cubanos.

Hoy además rendimos tributo a las Damas de Blanco, madres, esposas, hijas, hermanas y familiares, que contribuyeron a que el gobierno cubano iniciara el proceso de excarcelación de los presos. Ellas ofrendaron su sacrificio en momentos muy difíciles. No debemos olvidar que, junto al bregar de las valientes Damas y la solidaridad internacional, la Iglesia Católica Cubana jugó un papel muy importante en la excarcelación de todos los prisioneros de conciencia de la Primavera Negra.

Es una ocasión propicia para recordar que la Iglesia Católica cubana se mantuvo a nuestro lado, fue una de las pocas voces dentro de Cuba que nos acompañó en el sacrificio y se esforzó en que fuéramos liberados y en el bienestar de nuestras familias.

Miguel Galbán Gutiérrez (Güines, 1965) forma parte del Grupo de los 75. Fue acusado de Actos Contra la Independencia o la Integridad Territorial del Estado y, con solicitud de cadena perpetua por parte del Ministerio Fiscal, fue sentenciado a 26 años de cárcel en un juicio sumario plagado de arbitrariedades. Fue deportado a España el 24 de septiembre de 2010. Reside actualmente en los Estados Unidos.