martes , 17 septiembre 2024

2025 y el minuto de gloria energética

El ministro aseguró que en el 2025 se  experimentará el «primer minuto de generación eléctrica sin depender de combustible importado».

La Habana (Sindical Press) – Vicente de la O ha ofrecido las pautas de un paso relevante hacia la independencia energética en el venidero 2025. Lo ha hecho desde su posición como ministro de Energía y Minas (Minem) durante una de las emisiones del programa Mesa Redonda, la plataforma mediática del oficialismo donde falta la objetividad y sobran las falsas expectativas.

En la edición de marras del espacio audiovisual, el funcionario se mostró convencido de que en el venidero 2025 el país disfrutará el “primer minuto de generación eléctrica sin combustible importado “, una ambiciosa intención que, a pesar de tener grandes retos por delante, consideró alcanzable.

Para reforzar la solidez de sus argumentos, destacó el crecimiento de las fuentes renovables de energía, el avance de Energás —empresa que actualmente produce entre el 7% y 8% de la electricidad consumida en el país—, así como las reparaciones en las unidades térmicas.

Seguidamente, el director de Energías Renovables del Minem, Rosell Guerra, disertó sobre el proyecto de instalar 92 parques solares fotovoltaicos con una potencia total de 2 000 MW, resaltando que ya se encuentran en construcción 30 de estos dispositivos.

Además, informó sobre la instalación de diez parques de este tipo antes de que finalice el año, los cuales generarán un total de 220 MW, una cifra modesta en comparación con los más de 6.000 MW necesarios para cubrir la demanda nacional. De esa capacidad, alrededor del 40 % depende de centrales termoeléctricas, el 21,7 % de motores a fuel oil y el 21,9 % de motores a diésel.

El anuncio del probable uso de fuentes de energía basadas en la Isla no significa que los “apagones” vayan a disminuir y mucho menos eliminarse.

Se habló de un proyecto teóricamente alentador, pero a expensas de una sobrevaloración como tantas veces ha sucedido. Habría que ver la funcionalidad de esa tecnología dentro de una estructura que adolece de enormes fallas y requerida de una remodelación a fondo. Lo que se vende como una panacea debe ser interpretado, si acaso, como un alivio limitado hasta tanto no existan las evidencias de que es realmente viable. Son altas las probabilidades de otra tomadura de pelo. Hay que tener en cuenta los altos costos de inversión, las inclemencias climáticas y la calidad de los ciclos de mantenimiento.

Por el momento no hay escapatoria a los cortes del fluido eléctrico y sus efectos en los espacios residenciales y en las entidades productivas.

Los pasos hacia la independencia energética, como aseguraron ambos dirigentes, pueden ser más engañosos de lo podría pensarse.

Ese primer minuto de electricidad sin combustible importado suena demasiado jactancioso en un sistema plagado de charlatanes y mequetrefes.