‘El tema de solidaridad es de necesidad en el contexto actual de represión brutal’, considera el líder sindical Iván Hernández.
Madrid (Ángeles Rosas/DDC) – La Asociación Sindical Independiente de Cuba (ASIC) y los obreros de la Isla recibieron este lunes el respaldo de organizaciones sindicales de América Latina reunidas en Panamá, a propósito de la Conferencia Internacional de Solidaridad con el Movimiento Laboral Independiente de Cuba.
El evento sesionó en paralelo al Congreso Extraordinario de la Alternativa Democrática Sindical de las Américas (ADS), que se realiza entre el 14 y el 18 de mayo en la Ciudad de Panamá. Para finalizar, emitió una resolución de solidaridad con los trabajadores cubanos.
En el documento —enviado a DIARIO DE CUBA por Iván Hernández Carrillo, secretario general de la ASIC—, los participantes expresaron «profunda preocupación por las violaciones de los derechos humanos que persisten en Cuba» y reiteraron «irrestricto apoyo» a quienes «luchan por la libertad, la justicia y la democracia».
«Observamos con alarma las restricciones a la libertad sindical y el monopolio ejercido por la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), controlada por el Partido Comunista de Cuba (PPC). Esta situación impide que los trabajadores ejerzan su derecho a organizarse y negociar colectivamente en un ambiente libre y sin temor a represalias. Denunciamos las prácticas totalitarias institucionalizadas por el Gobierno unipartidista y exigimos el pleno respeto de la libertad sindical en Cuba», señalaron.
Rechazaron «enérgicamente las detenciones arbitrarias, el uso reiterado de la violencia, en el más amplio sentido del término, y la persecución sistemática que enfrentan tanto los trabajadores como los defensores de los derechos humanos».
«Es inaceptable que la participación en manifestaciones pacíficas u otras acciones ajenas al uso de la fuerza, cuyo objetivo es la emancipación integral e imperecedera del centralismo económico y político a ultranza, sean consideradas graves transgresiones del orden establecido y por tanto solventadas en juicios sin las debidas garantías procesales y encarcelamientos en condiciones infrahumanas», añadieron.
También demandaron «la liberación inmediata e incondicional de todos los presos políticos» y ofrecieron «respaldo a Yeilis Pérez Cruz, Gabriela Zequeira Hernández y todas las personas que han sido abusadas mientras se encontraban en cautiverio».
«Condenamos enérgicamente los actos de violencia sexual y otros lacerantes abusos, impunemente llevados a cabos por las autoridades penitenciarias. Es inaceptable que se cometan tales actos contra la integridad física y moral de las víctimas, especialmente en el caso de Gabriela Zequeira Hernández que, siendo menor de edad, no recibió la debida protección, lo cual aumenta la gravedad del delito», sostuvieron.
Para los firmantes, «es indignante que los centros penitenciarios se hayan convertido en espacios para el ejercicio de la tortura física y psicológica».
Exigieron «a las autoridades cubanas una investigación de las denuncias de abuso sexual y violencia en las cárceles y que se lleve a los responsables ante la justicia», así como «el respeto a los derechos de los presos políticos, que incluyen, un trato digno, la protección de su integridad física y psicológica y un proceso legal justo».
Por otra parte, instaron al régimen cubano «a tomar medidas concretas e inmediatas con el fin de solventar las necesidades básicas y sentar las bases para un despegue socioeconómico real y sostenible», en vista del «deterioro de las condiciones de vida» que «alcanza niveles nunca antes vistos, acrecentándose también las limitaciones en el ejercicio de los derechos económicos y sociales de los trabajadores».
«Reafirmamos nuestro compromiso en denunciar ante la comunidad internacional las violaciones a los derechos humanos y laborales en Cuba. Instamos a los gobiernos, organizaciones internacionales y defensores de los derechos humanos a mantener la presión sobre el Gobierno cubano para que garantice el ejercicio de los derechos fundamentales de sus ciudadanos y ponga fin a la represión sistémica», añadieron los firmantes.
«Expresamos nuestra solidaridad con la ASIC, cuyos integrantes luchan valientemente por la reivindicación de los derechos de los trabajadores. Reconocemos su labor y los instamos a seguir adelante en sus demandas por la libertad sindical, la negociación colectiva y la defensa de los derechos laborales», declararon.
Los participantes en la conferencia solicitaron «a la comunidad internacional redoblar su apoyo a los trabajadores cubanos en su búsqueda de una sociedad democrática, económicamente viable y con justicia social».
«Exhortamos a los gobiernos, organizaciones sindicales y defensoras de los derechos humanos a brindar asistencia y solidaridad a los trabajadores cubanos, así como también concertar estrategias que obliguen al régimen a cumplir con sus obligaciones internacionales en materia de derechos humanos y laborales», concluyeron.
En la conferencia participaron la profesora Nelva Reyes Barahona, secretaria general de la central general de trabajadores de Panamá; Orlando Gutiérrez Boronat, portavoz de la Asamblea de la Resistencia Cubana; Emilio Gottardi, secretario general de la ASIC en La Habana; Charlie Rodríguez Ledesma, presidente del Colegio Independiente de Cuba; Joel Brito, representante internacional de la ASIC y director del Grupo Internacional para la Responsabilidad Social Corporativa en Cuba (GIRSCC), y Carlos Reyes Consuegras, también de la ASIC.
También asistieron Ricardo Godoy, diputado de El Salvador y representante del Frente Hemisférico por la Libertad, y Nilton Neco Souza Da Silva, presidente de la ADS, a cargo de la clausura del evento solidario.
Iván Hernández Carrillo, secretario general de ASIC, participó vía internet con un mensaje desde la Isla.
En declaraciones a DIARIO DE CUBA, Hernández Carrillo calificó este encuentro como de gran relevancia para visibilizar la situación que vive el sindicalismo independiente en la Isla.
«En medio del actual contexto represivo y de hostigamiento en que estamos obligados a vivir, la solidaridad juega un papel de primerísima importancia al asumir una posición activa, denunciando e informando en este caso a las organizaciones sindicales internacionales la situación de brutal persecución en que vivimos», señaló el opositor.
«Desde el año pasado, que se celebró la primera conferencia en San José de Costa Rica, hemos recibido enormes muestras de solidaridad que nos animan a seguir adelante y a no desfallecer», insistió.
«El tema de la solidaridad es de necesidad, precisamente en este momento, cuando el régimen intenta aislarnos y refuerza como nunca antes su maquinaria represiva para tratar de hacer desaparecernos», dijo.
«Quiero aprovechar la oportunidad para expresar mi alegría por la acogida que tuvo esta conferencia y por el respaldo mayoritario que recibió la resolución de solidaridad que finalmente fue aprobada. El mensaje quedó bien claro este lunes en Panamá. Se dijo alto: solidaridad con los sindicalistas independientes y condena a la dictadura que cada día está más sola» concluyó.