Largas colas en los cajeros automáticos, la escasez de efectivo, los problemas técnicos y la imposibilidad de retirar el dinero.
(Ivette Pacheco / Martí Noticias) – En medio de las múltiples dificultades que impone la grave crisis económica que afecta a Cuba, los ancianos en la isla se someten a otra batalla titánica, la de cobrar sus pensiones.
De las largas colas en los cajeros automáticos, la escasez de efectivo, los problemas técnicos y la imposibilidad de retirar el dinero hablan varios testimonios recogidos por Martí Noticias en distintas provincias del país.
Desde el año 2020, Cuba abolió el pago por chequera y dispuso que los beneficiados de la seguridad social recibieran su dinero únicamente de forma digital en los Bancos, Cadecas y correos de todo el país.
Desde Guantánamo, una de nuestras entrevistadas, aseguró que su madre acumula meses sin poder cobrar la jubilación, debido a la falta de fondos en los cajeros.
La historia se repite en Las Tunas, donde Ada Rabert relató cómo la interrupción del servicio eléctrico y la escasez de efectivo agravan la situación, dejando a los ancianos sin acceso a sus pensiones, incluso cuando ya han estado por varias horas haciendo fila en los cajeros automáticos.
Yadira Pozo, también desde Las Tunas, describe la frustración de enfrentarse mes tras mes al mismo problema: cajeros trabados, falta de billetes y largas esperas que no conducen a una solución.
“Ayer mismo, cuando yo estaba en la cola, una tarjeta se quedó trabada, creo que era lo que decían, había un solo cajero funcionando y el otro cajero no funcionó en todo ese tiempo y el que tenía que eran billetes de a 20 nada más, se acabó”, dijo Pozo.
Un empleado del Banco de Crédito y Comercio (BANDEC) en Las Tunas, que fue consultado por Martí Noticias sobre este asunto, negó estos problemas, desconociendo las dificultades que enfrentan los ancianos para acceder a su dinero.
“Yo no reconozco que haya problema con eso, no estoy de acuerdo con lo que usted está planteando. O sea, las personas tienen el derecho de plantear cualquier inquietud, pero no coincido en ese planteamiento”, indicó el trabajador de BANDEC.
En La Habana, la activista Dunia Medina relató las duras condiciones que enfrentan las personas cuyo único sustento es la pensión y habló de las colas del Banco Metropolitano Los Colonos, ubicado en Juan Delgado y Lacret, en Santo Suárez: “Las colas son de más de tres horas o cuatro horas y hay, a veces, un solo cajero funcionando porque los demás están sin dinero. Hay unos cajeros ahí que tienen situación, que se le trabó la tarjeta magnética a más de cinco personas y tuvieron que esperar hasta el lunes que abriera el Banco para recuperar tu tarjeta. Dicen ellos, como siempre, que es ‘problema del bloqueo’”.
Medina compartió además la historia de una anciana que se desmayó en una cola para acceder al cajero mientras afirmó que los ancianos cubanos, después de una vida de trabajo duro, se ven abandonados en su vejez.
“Es muy triste como nuestros familiares ancianos delante de uno se nos van depauperando por falta de todo, después que han trabajado tantos años y que no tengan alimentos, no tengan una atención adecuada, no tengan leche, no tienen nada”, dijo.