La ola de huelgas sigue a la muerte de la enfermera Parvaneh Mandani debido a una carga de trabajo excesiva.
(Iran International) – A medida que los disturbios laborales continúan en aumento en Irán, con huelgas y protestas por parte de enfermeras que se extienden por diversas ciudades, el Sindicato de Propietarios y Conductores de Camiones ha decidido respaldar a los trabajadores de la salud.
El apoyo del sindicato marca una intensificación del descontento laboral generalizado en el país. En un comunicado emitido el lunes, los conductores de camiones declararon su solidaridad con la lucha de las enfermeras, advirtiendo que si no se atienden las demandas del personal médico, ellos también se unirán a huelgas y protestas.
«Advertimos que si las justas demandas de las enfermeras no se satisfacen, nosotros, los conductores de camiones y conductores a nivel nacional, haremos huelga y protestaremos en su apoyo,» dice el comunicado del sindicato.
La ola de protestas por parte de grupos de enfermería y personal médico ha continuado sin cesar este mes, con manifestaciones y huelgas reportadas en ciudades como Mashhad, Ahvaz e Isfahan. En Mashhad, las enfermeras se manifestaron, mientras que sus colegas en otras ciudades extendieron la huelga nacional. Videos obtenidos por Iran International revelan que las enfermeras del Centro Educativo-Terapéutico Kashani en Isfahan se unieron al creciente movimiento, cantando consignas como «Enfermera, grita, exige tus derechos.»
El salario mensual promedio de las enfermeras es de aproximadamente $220, cerca del salario mínimo establecido por el gobierno, mientras que a menudo trabajan largas horas sin recibir pago por horas extras.
Mientras tanto, en Ahvaz, las enfermeras se reunieron frente a la Gobernación de Khuzestan, expresando sus frustraciones con consignas como «No hemos visto resultados/ Solo hemos oído promesas» y «Luchamos contra el COVID, no vimos apoyo.»
El 17 y 18 de agosto, los disturbios se extendieron aún más, con grupos de enfermería y personal médico en Arak, Jahrom, Qazvin, Mashhad y Yasuj organizando protestas para destacar sus problemas en curso. Los manifestantes han expresado una variedad de quejas, incluyendo tarifas de horas extras inadecuadas y tarifas poco realistas. Sus demandas también incluyen la implementación de leyes relacionadas con trabajos duros y perjudiciales y el fin de las horas extras obligatorias.
Mohammad Reza Sharifi-Moghaddam, Secretario General de la Casa de Enfermería, dice: “Por primera vez en los 100 años de historia de la enfermería moderna en el país, estamos presenciando protestas en forma de paros laborales. Cuando las enfermeras dejan de trabajar, nos preocupamos mucho. Desafortunadamente, las autoridades no están prestando atención, no han recibido el mensaje y no entienden la situación.”
La actual ola de huelgas sigue a la muerte de Parvaneh Mandani, una enfermera de 32 años que falleció el 2 de agosto debido a una carga de trabajo excesiva, una condición conocida como «Síndrome Karoshi» en medicina. Su muerte ha galvanizado aún más a las enfermeras de todo el país, llevando a una expansión de las huelgas.
Una coalición estudiantil ha instado a toda la comunidad, particularmente a los estudiantes de medicina, a apoyar la causa de las enfermeras. Esta ampliación del apoyo subraya la profunda crisis dentro del sistema de salud de Irán, que ha visto protestas repetidas en los últimos meses.
Fereydoun Moradi, miembro del Consejo Supremo de Enfermería, reveló que entre 150 y 200 enfermeras emigran cada mes debido a las condiciones laborales insostenibles y la compensación inadecuada. La insatisfacción entre el personal médico se ha visto agravada por ataques frecuentes y una falta de medidas de apoyo.