DDC | Camagüey – La periodista independiente Sol García Basulto fue detenida este viernes en Camagüey durante dos horas «por hacer una foto a agentes» del régimen, según denunció en su perfil de Facebook.
«Como las personas no tenemos derecho de recopilar información y difundirla, acabo de pasar dos horas secuestrada en la unidad número tres de la Policía Nacional. Fui secuestrada por los oficiales Joan y Frank de la Seguridad del Estado, según los agentes ‘detenida’, pero como es de una manera arbitraria le llamo secuestro», explicó la periodista.
Sobre el motivo de la detención explicó: «Mientras pasaba casualmente delante de un parqueo de la calle República vi que estaban los agentes en determinada actividad y decidí tomar una foto porque creo en esas libertades humanas que nos permiten recopilar información y difundirla».
«Uno de los agentes me vio. Primero intentó arrebatarme el teléfono. Logré escapar. Con ayuda de oficiales de la PNR logró detenerme. Fui conducida (a la patrulla) delante de todo el mundo en la Plaza del Gallo, un lugar muy conocido. Allí públicamente fui empujada a la fuerza a una patrulla de la Policía», agregó.
Asimismo, García Basulto condenó que las autoridades la detuvieron «a pesar de haber borrado la foto».
«He perdido nuevamente mi teléfono celular. Ya es el segundo que pierdo este año en manos del mismo oficial. Mi teléfono fue robado por ellos, aun cuando destruí la información y la foto que había tomado delante de ellos», agregó.
Sobre el arresto, dijo que fue sometida a «interrogatorios»: «En las dos horas que estuve detenida fui cuestionada porque trabajo como periodista. Me mencionaron algunos trabajos que he estado haciendo hace poco, con los que por supuesto no están contentos porque demuestran los problemas que tienen las personas en Cuba y que realmente no existe democracia».
Desde el pasado mes de marzo, el régimen acusa a García Basulto del presunto «delito de usurpación de la capacidad legal» por «hacer entrevistas en la vía pública y publicarlas en la revista La Hora de Cuba». Desde julio, la periodista tiene una medida cautelar de prisión domiciliaria.
En los últimos meses el régimen le ha impedido a García Basulto llegar a La Habana y viajar a Panamá, la detuvo en noviembre pasado también y le ha prohibido ejercer el periodismo.
En mayo, en entrevista con este diario, la joven afirmó que los agentes de la Seguridad del Estado no la dejaban «llevar una vida normal» y que «interrumpían en cualquier momento».
A finales de septiembre, fue citada en una unidad policial donde las autoridades la «amenazaron como es habitual con separarme de Árbol (mi hijo de tres años), con que van a atropellarme».
El régimen suele perseguir y reprimir a los periodistas independientes. Les impide salir de la Isla, los detiene y somete a interrogatorios por su trabajo informativo.