domingo , 26 enero 2025
José Carlos Guerrero Gracia (i), junto a su padre y otros miembros de su familia. (DDC/Julio César Guerrero Batista)

‘Como si fuéramos criminales’, el padre de un recluta muerto en Holguín denuncia el trato de las autoridades

El trato denunciado por Guerrero Batista contrasta con la pretensión del régimen cubano de presentar a los fallecidos como héroes.

Holguín (DDC) – El cubano Julio César Guerrero Batista, padre del joven José Carlos Guerrero Gracia, uno de los nueve reclutas del Servicio Militar Obligatorio fallecidos en las explosiones que ocurrieron el 7 de enero en un almacén de armamento y municiones de Holguín, denunció este lunes el trato humillante que recibió durante la ceremonia con la que se rindió homenaje a los 13 efectivos que perdieron la vida.

El hombre, que la semana pasada exigió el cuerpo de su hijo y calificó de engaño la declaración de las autoridades de que habían buscado a los 13 militares, reportados inicialmente como desaparecidos, este lunes dijo sentirse “satisfecho” de cumplir con el joven.

No obstante, afirmó haberse dado cuenta “del desprecio que se siente por el cubano de a pie”, en un post publicado en Facebook que fue borrado posteriormente, aunque varios medios independientes hicieron captura de pantalla.

“Lo primero que hicieron fue pasarnos un detector de metales a mi esposa, a hijo de 17 años y a mí, como si fuéramos criminales, sin respetar nuestro dolor”, criticó Guerrero Batista.

Posteriormente, los tres fueron conducidos a un salón debajo de la plaza y, aunque Guerrero Batista dijo que las personas que los atendieron fueron “muy amables”, les impidieron comunicarse con el resto de su familia ni con los allegados de los otros muertos.

A su hija y a la esposa de su hijo fallecido no les permitieron pasar a la plaza a ponerle flores al joven recluta.

A Guerrero Batista, su esposa y su hijo, después de colocar las flores, los pasaron nuevamente al mismo salón y media hora después se encontraban camino a su municipio.

Su hija y su nuera pudieron localizarlos cuando estaban a punto de montarse en la guagua. Solo entonces pudieron abrazarse.

“En la ceremonia, detrás de nosotros, se encontraban los invitados del faraón y familia de los altos dirigentes, formando un muro para que ni un plebeyo pudiera pasar a la ceremonia”, contó Guerrero Batista, quien describió como “humillante lo que les hicieron a mi familia y a las demás familias de las víctimas de la explosión en la unidad militar de Melones, en Holguín”.

El trato denunciado por Guerrero Batista contrasta con la pretensión del régimen de presentar a los fallecidos como héroes.

El 15 de enero, fecha en que el Ministerio de las Fuerzas Armadas declaró oficialmente muertos a los 13 efectivos, Miguel Díaz-Canel lamentó en sus redes sociales “confirmar el fallecimiento de oficiales, suboficiales y soldados que enfrentaron heroicamente el accidente (…)”.

No obstante, al gobernante le tomó cuatro días decretar el Duelo Oficial en Cuba por los fallecidos, en contraste con su celeridad para declarar el luto por aliados de La Habana.

La afirmación de que los muertos eran héroes, como también presentó el régimen a los 17 muertos durante el incendio en la Base de Supertanqueros de Matanzas en 2022 —entre ellos varios reclutas de Servicio Militar— genera indignación en las redes sociales, donde crece el rechazo contra el reclutamiento obligatorio.

Daliha Gonzalez Almaguer, hermana de Frank Antonio Hidalgo Almaguer, otro de los reclutas que perecieron, escribió en la página de Facebook “Revolico Freyre” que para la familia es triste “escuchar decir son héroes, combatientes, murieron por defender la patria (…)” y recordó que “nadie nos estaba atacando”.

“Acaben de entender que fue una pésima decisión que tomaron, de la cual ahora ni nunca dirán quién fue responsable”, exigió.

En las decenas de reacciones que recibió su publicación, todos los usuarios coincidieron con ella y criticaron la decisión de las autoridades de enviar a jóvenes sin experiencia a extinguir el incendio que se produjo en almacén, según las autoridades, por un fallo eléctrico. En los comentarios, varias personas también exigieron el fin del Servicio Militar Obligatorio.

Hasta el momento, ni la Fiscalía Militar de Oriente ni la Fiscalía General de la República de Cuba, a la que se subordina la anterior, han informado sobre las medidas que se han adoptado contra los presuntos responsables.

Como explicó DIARIO DE CUBA en un análisis, la Ley del Código Penal Militar, que fue aprobada en 2023 por la Asamblea Nacional del Poder Popular y castiga con cárcel a quien evada el Servicio Militar Obligatorio, también prevé sanciones para el delito de negligencia en el servicio.

El Artículo 38.1 dispone que “el jefe o el funcionario que, en forma reiterada, realice negligentemente sus obligaciones o tareas del servicio, incurre en sanción de privación de libertad de seis meses a dos años o multa de 200 a 500 cuotas, o ambas”.

El punto 2 establece que “si la conducta negligente, aunque no sea reiterada, la comete quien sea responsable de ordenar la aplicación o ejecución de las medidas referentes a la seguridad y protección del personal durante la prestación del servicio militar, o aquel que directamente ha de ejecutarlas, y dé lugar o propicie que se produzca la muerte de una persona o lesiones graves, incurre en sanción de privación de libertad de uno a diez años”.

De acuerdo con la ley, los jefes militares del polvorín holguinero y los responsables del cumplimiento de los protocolos y medidas de seguridad para el manejo del material explosivo o la ocurrencia de un incendio en esa unidad serían los presuntos culpables del mencionado delito, que costó la vida a 13 militares, entre ellos los nueve reclutas.