El cargo impuesto tuvo como trasfondo su activismo sindical y resultó ser el punto culminante de una serie de represalias.
Pittsburgh (Sindical Press) – La acusación por desacato a la autoridad imputada al trabajador por cuenta propia e integrante de la ASIC, Rodolfo Aparicio Alemán, tras su arresto el pasado 12 de enero, concluyó con una multa de 1000 pesos y el reintegro de la fianza de 5000 que le exigieron para salir de la prisión de Ariza, a donde lo condujeron 6 días después de la detención.
El cargo impuesto tuvo como trasfondo su destacado activismo sindical y resultó ser el punto culminante de una serie de represalias que han afectado a algunos de sus familiares. Se recuerda que su padrastro y hermano, también terminaron en la estación policial el día en que ocurrieron los hechos, tras la intercepción del automóvil donde viajan hacia una feria agropecuaria con la finalidad de vender sus productos.
Entre las causas que podrían haber incidido en la decisión de los acusadores de ponerle fin al proceso con una medida pecuniaria en vez de encarcelarlo, se cuenta en primer lugar el interés asumido por el Comité de Libertad Sindical (CLS) de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), a partir de las misivas firmadas por el secretario general de la Asociación Sindical Independiente (ASIC), Iván Hernández Carrillo, con los pormenores del asunto. El interés asumido por el CLS, desde donde se les reclamó, a las instancias pertinentes dentro de la Isla, explicaciones en torno al proceder arbitrario contra el activista, devino en un factor de raigal importancia que contribuyó a maximizar la atención sobre el abuso y la vulnerabilidad de quienes han decidido plantarle cara al totalitarismo.
Por otro lado, habría que destacar el comunicado de la Alternativa Democrática Sindical de las Américas (ADS), con representatividad en una docena de países y a la cual la ASIC pertenece, desde su fundación en 2017, en el cual se pusieron en perspectiva los métodos represivos del régimen en detrimento de los derechos humanos y la libertad sindical, se convocó a la solidaridad internacional y reiteró el incondicional apoyo al trabajo de ASIC.
El hecho de que Rodolfo se haya librado de la cárcel no significa un cambio en la manera de actuar de quienes odian la pluralidad y redoblan sus diligencias represivas en la medida que se agrietan los fundamentos del sistema.
Estará bajo la lupa de los inquisidores y por tanto en peligro de enfrentar otras arremetidas por solo pensar diferente y actuar en consecuencia.
Una realidad dura que solo se puede enfrentar con la convicción de estar en el camino correcto.