La Isla acompaña a países de férrea censura, como Irán, Eritrea, Corea del Norte, Arabia Saudita, China, Vietnam y Bielorrusia.
DDC | Madrid – «Cuba sigue teniendo el clima más restringido para el ejercicio del periodismo de las Américas», concluyó un reporte especial del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés).
El documento, titulado «Los diez países con los mayores niveles de censura», puso como ejemplo de la situación que padece el periodismo independiente en la Isla el caso de Roberto Jesús Quiñones Haces, condenado a un año de cárcel por intentar cubrir un juicio a dos pastores en Guantánamo que fueron sancionados por educar a sus hijos en su casa.
El caso ha adquirido amplia resonancia internacional, y ha generado la condena de diversos organismos, entre ellos la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP). «Nada nos sorprende del Gobierno cubano, tan acostumbrado a perseguir periodistas independientes en su afán por censurar las críticas, las opiniones y la información libre», dijo al respecto la presidenta de la SIP, María Elvira Domínguez, directora del diario El País de Cali (Colombia) en un comunicado.
El CPJ advirtió que la reciente reforma constitucional convocada por el Partido Comunista fue «una oportunidad desperdiciada», dado que la nueva Carta magna «no incluyó ningún relajamiento de las restricciones sobre los medios.»
«Cuba introdujo el acceso a la Internet en el hogar en 2017 y los planes de datos móviles en 2018, pero los servicios tienen precios exorbitantes para la mayoría de los cubanos, pues cuatro gigabytes de datos cuestan unos 30 dólares estadounidenses, el equivalente del salario mensual estatal promedio en 2017».
Asimismo, el monopolio estatal ETECSA «tiene órdenes de bloquear contenido objetable, e impide el acceso a algunos blogs y plataformas de noticias críticos, según un informe del Open Observatory of Network Interference, que recopila datos sobre la interferencia en las redes.»
«El Gobierno arremete contra los periodistas críticos mediante el acoso, la vigilancia física y digital, las detenciones a corto plazo, los registros de viviendas y las confiscaciones de equipos. (…) Las autoridades otorgan selectivamente los visados a periodistas extranjeros, según el informe ‘Libertad de prensa’, de Freedom House.»
El informe del CPJ ubicó a Cuba dentro de una relación que completan Eritrea («el país con los mayores niveles de censura del mundo»), Corea del Norte, Turkmenistán, Arabia Saudita, China, Viet Nam, Irán, Guinea Ecuatorial y Belarús.
«De conformidad con el Artículo 19 de la Declaración Universal sobre los Derechos Humanos, toda persona tiene el derecho de buscar y recibir noticias y expresar opiniones. Estos diez países violan la normativa internacional al prohibir o restringir drásticamente los medios independientes y al intimidar a los periodistas a silenciarse por medio de amenazas de prisión, vigilancia física y digital y otras formas de acoso. La autocensura es generalizada en estos países», precisó el informe.
El CPJ es una organización apolítica y sin fines de lucro, con sede en Nueva York, fundada en 1981 para luchar contra abusos contra la prensa y fomentar la libertad de expresión en todo el mundo. La fundó un grupo de periodistas estadounidenses en respuesta al tratamiento brutal al cual eran sometidos colegas suyos por parte de gobiernos autoritarios y otros enemigos del periodismo independiente en el extranjero.