viernes , 22 noviembre 2024
Manifestantes a bordo de un camión cerca de la Plaza de Tiananmen en Beijing en mayo de 1989. Uno parece estar en un uniforme de policía. No era inusual que los oficiales de policía se unieran a los manifestantes. Foto: David Chen

EEUU envía fuerte mensaje a China en aniversario 30 de Tiananmen

El mensaje expresa que los Estados Unidos ha perdido la esperanza en un cambio hacia “una sociedad más abierta y tolerante”

Estados Unidos publicó este lunes un comunicado a propósito de conmemorarse el 30 aniversario de Tiananmen donde exige a China que detenga la persecución política y publique la cifras de víctimas de esta masacre.

Estados Unidos publicó este lunes un comunicado a propósito de conmemorarse el 30 aniversario de Tiananmen donde exige a China que detenga la persecución política y publique la cifras de víctimas de esta masacre.

A continuación reproducimos el comunicado publicado por el Departamento de Estado:

El 4 de junio, honramos el heroico movimiento de protesta del pueblo chino que terminó el 4 de junio de 1989, cuando el liderazgo del Partido Comunista Chino envió tanques a la Plaza de Tiananmen para reprimir violentamente las manifestaciones pacíficas que reclamaban democracia, derechos humanos y el fin de la corrupción rampante.

Los cientos de miles de manifestantes que se reunieron en Beijing y en otras ciudades alrededor de China sufrieron gravemente en busca de un mejor futuro para su país. El número de muertos sigue siendo desconocido. Expresamos nuestro profundo pesar a las familias que todavía están afligidas por sus seres queridos perdidos, incluidas las valientes Madres de Tiananmen, que sin importar los riesgos, nunca han dejado de buscar que se haga justicia. Los eventos de hace treinta años todavía agitan nuestra conciencia y la conciencia de las personas amantes de la libertad en todo el mundo.

Por décadas Estados Unidos tuvo esperanzas de que la integración de China en el sistema internacional condujera a una sociedad más abierta y tolerante. Esas esperanzas han sido frustradas.

El Estado de partido único de China no tolera la disidencia y abusa de los derechos humanos cuando sirve a sus intereses. Hoy, los ciudadanos chinos han sido sometidos a una nueva ola de abusos, especialmente en Xinjiang, donde el liderazgo del Partido Comunista está intentando metódicamente estrangular la cultura uigur y acabar con la fe islámica, incluso a través de la detención de más de un millón de miembros de la minoría musulmana.

Aun cuando el partido construye un poderoso estado de vigilancia, los ciudadanos chinos comunes continúan tratando de ejercer sus derechos humanos, organizando sindicatos independientes, buscando justicia a través del sistema legal, y simplemente expresando sus opiniones, por las cuales muchos son castigados, encarcelados e incluso torturados.

Saludamos a los héroes chinos que valientemente se levantaron hace treinta años en la Plaza de Tiananmen para exigir sus derechos. Su valor ejemplar ha servido de inspiración para las generaciones futuras que reclaman la libertad y la democracia en todo el mundo, comenzando con la caída del Muro de Berlín y el fin del comunismo en Europa del Este en los meses que siguieron.

Instamos al gobierno chino a que haga un informe público completo de los muertos o desaparecidos para brindar consuelo a las muchas víctimas de este oscuro capítulo de la historia. Tal paso comenzaría a demostrar la voluntad del Partido Comunista de respetar los derechos humanos y las libertades fundamentales.

Hacemos un llamado a China para que libere a todos los detenidos por tratar de ejercer estos derechos y libertades, detenga el uso de la detención arbitraria y revierta las políticas contraproducentes que combinan el terrorismo con la expresión religiosa y política. La propia constitución de China estipula que todo poder pertenece al pueblo.

La historia ha demostrado que las naciones son más fuertes cuando los gobiernos responden a sus ciudadanos, respetan el estado de derecho y defienden los derechos humanos y las libertades fundamentales.