El INAI ha acusado al régimen cubano de embolsarse el 94,4% del salario de los médicos enviados durante la pandemia.
Ciudad de México (DDC) – Dos semanas después de haber anunciado la contratación de 2.700 médicos cubanos, el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo, dijo al periódico local La Jornada que serán 3.800 los profesionales exportados por el régimen de La Habana, que se sumarían, en los próximos meses, a los 1.200 que ya trabajan en el país, para así completar los 5.000 médicos.
El funcionario, que fue ratificado en su puesto por la presidenta electa Claudia Sheinbaum, dijo que la falta del 30% de los profesionales necesarios en zonas rurales será cubierta «con los médicos cubanos que ya están llegando como parte del convenio con la Isla«. «Si hay una propuesta de médicos mexicanos, la tomamos de inmediato, pero la realidad es que no hay quien quiera ir a esos hospitales que tienen, en promedio, 20 camas, una sala de expulsión, cinco consultorios y una pequeña área de urgencias», agregó.
Robledo destacó que dichos hospitales «tienen quirófano, pero no hacían cirugías, área de consulta externa, pero sin médicos» y que la llegada de los especialistas cubanos «ha ayudado» a concretar el encargo de dotar de cirujanos, anestesiólogos, pediatras y ginecólogos a zonas rurales.
El funcionario dijo, además, que hay alrededor de 600 médicos cubanos en consultorios y otros 600 están en 282 hospitales generales rurales. «Están en áreas de muy alta marginación, a donde los galenos (mexicanos) no quieren ir», acotó.
«Por eso es tan importante la colaboración que tenemos con el Gobierno de Cuba, porque en el último convenio, además de los 950 médicos que ya están laborando en 23 estados del país, se están sumando 2.700», dijo el funcionario, citado por el diario mexicano Milenio, el 16 de julio. Dos semanas después, el mismo funcionario cambió de número, donde dijo «digo» digo «Diego» y ya no serán 2.700, ahora serán 3.800 médicos.
Por su parte, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, estrecho aliado del régimen de Cuba, dijo recientemente que su Gobierno busca la gratuidad total en el sistema público de salud, y destacó que el convenio con La Habana fue pensado «para tener todos los médicos y todos los especialistas».
No obstante, a finales de junio, el titular del IMSS en el estado de San Luis Potosí, Daniel Acosta Díaz de León, dijo al medio local El Sol de San Luis, que «ha habido un rechazo a que vengan médicos extranjeros, pero por más convocatorias que hemos hecho no se ha podido llenar los lugares, por eso recurrimos a la contratación de médicos cubanos».
La mejoría del sistema sanitario de México expuesta por AMLO se produce mientras faltan especialistas y personal sanitario en los hospitales de Cuba. De acuerdo con el Anuario estadístico de 2022, que publica la estatal Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI), durante ese año trabajaban en la Isla 12.065 médicos menos que en 2021. Ello afectó muy gravemente a especialidades como la estomatología y la enfermería.
Asimismo, la contratación de médicos cubanos por parte del Gobierno mexicano no ha estado libre de polémicas. En enero de 2024, el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) de México acusó al Gobierno de Cuba de embolsarse el 94,4% del salario de los médicos enviados al territorio mexicano durante la pandemia del Covid-19, cuando se produjo la primera exportación de esos profesionales a la nación vecina.
Dicha acusación está en consonancia con los señalamientos de la ONU al régimen cubano por la persistencia de las violaciones de los derechos de los trabajadores exportados, en especial los médicos enviados a «misiones internacionalistas». En una carta enviada a la representación de la Isla ante el Consejo de Derechos Humanos por Tomoya Obokata, Relator Especial sobre las formas contemporáneas de la esclavitud, incluidas sus causas y consecuencias, este advirtió que ha continuado recibiendo acusaciones acerca de un patrón que califica, entre otras violaciones, como «trabajo forzoso».