DDC | La Habana – La Dirección General de Transporte Provincial La Habana determinó suspender definitivamente los servicios de piquera, parqueo o estacionamiento dentro del parque El Curita, que ha sido hasta ahora el punto neurálgico de la transportación privada hacia los distintos destinos de la capital cubana.
La medida publicada por el periódico Tribuna de La Habana está vigente desde este martes 2 de abril y se hace efectiva tras el fracaso del «experimento» con los taxis urbanos emprendido por el Gobierno.
El semanario oficial menciona como motivo «la reorganización de las piqueras en la capital y los trabajos de reparación» que se realizarán en el mencionado parque del municipio Centro Habana.
Parqueos de organismos estatales establecidos en El Curita, como el del Consejo de la Administración Municipal de Centro Habana, se reubicarán en el estacionamiento de calle Ángeles entre Reina y Estrella, y el de la empresa estatal ETECSA se trasladará a calle Águila entre calle Zanja y Barcelona.
Los transportistas y usuarios que hasta el momento recibían los servicios de piquera dentro del parque, podrán utilizar entre otras, las piqueras con destino libre ubicadas en: Calle Dragones entre Galiano y Águila; Calle Estrella entre Águila y Amistad; Calle Rayo y Reina; Calle Maloja entre Ángeles y Águila; Calle Manrique entre Reina y Estrella; Calle Barcelona y Galiano y Calle Concordia y Galiano.
Tribuna de La Habana señala que los usuarios también podrán trasladarse hacia los diferentes municipios, a través de los servicios de Taxis en Ruta con autos o microbús, que transitan en la zona aledaña al parque.
Por la Calle Reina transitan las rutas con los siguientes destinos: la ruta 5 con destino a Santiago de las Vegas; la ruta 8 con destino al Cotorro; la ruta 11 con destino a San Miguel del Padrón; la ruta 16 con destino a Alamar Micro X y la ruta 22 con destino al Reparto Bahía.
Por la Calle Dragones transitan las rutas 7 y 10; la ruta 7 con destino a Santa Fe en Playa y la ruta 10 con destino a Regla.
Por la Calle Galiano la ruta 19 con destino a La Lisa y por Calle Monte la ruta 6 con destino a Guanabacoa.
La Dirección General de Transporte reconoció que estas «necesarias medidas» pueden ocasionar molestias, ante lo que se limitó a ofrecer disculpas.
Las regulaciones a los taxistas privados cubanos conocidos popularmente como «boteros», aprobadas por Miguel Díaz-Canel el pasado año, generaron una crisis en el transporte más grave de la que ya existía en la capital. De las tres licencias que fijó el «experimento», ninguna acomodó a los choferes.
Antes de que entraran en vigor las regulaciones, tenían licencias para operar 6.675 porteadores privados (con medios para entre cuatro y 14 pasajeros). De este número, a 1.763 les fueron retirados los permisos por varias cuestiones.
Un total de 4.356 conductores debieron renovar su licencia, según las nuevas normas, pero lo cierto es que no todos aceptaron sumarse a un plan que terminó afectándolos.
La situación ha perjudicado mayormente a las personas que necesitan trasladarse, pues el «experimento», como fue anunciado por el Gobierno, no es rentable para el taxista. Es por ello que los clientes terminan quedándose sin transporte, o pagando cifras más elevadas que antes para poder moverse.