jueves , 21 noviembre 2024
Universidad de Camagüey expulsa al periodista y profesor José Luis Tan Estrada por motivos políticos.

Universidad de Camagüey expulsa a profesor por motivos políticos

La dirección determinó trasladarlo a otro puesto de trabajo donde “no tenga responsabilidades con las educación de las nuevas generaciones”.

(Ola Académica) – José Luis Tan Estrada, profesor y periodista, resultó expulsado de la Universidad de Camagüey “Ignacio Agramonte Loynaz” (UC) por su postura crítica hacia el régimen cubano y sus publicaciones de denuncia en Facebook.

​“De la reunión en que se me comunicó esta decisión me enteré hoy [29 de noviembre], por un profesor que mandaron a localizarme, ya que ninguno de los responsables me citó”, relató Tan Estrada.

​La comisión enjuiciadora estuvo integrada por Dania Santi, decana de la Facultad de Lengua y Comunicación, Iamir Céspedes, jefa de Recursos Humanos de la UC, la directora de la Dirección Provincial de Trabajo, y tres directores de empresas: la Fábrica de Conservas, la Empresa Provincial de Alojamiento, y la Delegación de Recursos Hidráulicos de la provincia de Camagüey.

​En su evaluación de adiestrado los censores aseguraron que “es evidente su distanciamiento de la ideología y los valores de la Revolución, su falta de objetividad en el manejo de los contenidos sobre el proceso revolucionario cubano, lo que devela la influencia negativa y manipuladora con la que maneja las redes sociales”.

​Sin embargo, el docente demostró sus resultados académicos e investigativos, así como su “profesionalidad impartiendo clases sin influenciar en la forma de pensar de los estudiantes”. También invitó a leer cada texto suyo para que le dijeran dónde estaban las malas prácticas periodísticas, según explicó en su perfil de Facebook.

​La dirección de la UC decidió romper el vínculo laboral con Tan Estrada. Además, determinaron trasladarlo a otro puesto de trabajo en el que “no tenga responsabilidades con las formaciones de profesionales ni la educación de las nuevas generaciones de periodistas y comunicadores sociales, por pérdida de los requisitos establecidos en el reglamento docente de la Educación Superior Cubana”, reza el documento que le entregaron al profesor durante la reunión.

​Las ofertas de trabajo fueron: técnico de inversiones en la Fábrica de Conservas o en Recursos Hidráulicos y técnico de gestión marketing en la Empresa de Alojamiento.

“Para nada tienen que ver con mi perfil profesional y académico”, denunció el docente.

Semanas antes de la reunión, sufrió la represión y la censura por parte de la universidad. Sin aviso previo le restringieron el acceso a internet y a las computadoras de la casa de altos estudios.

​Al mismo tiempo, recibió “ataques constantes de perfiles falsos por Facebook, campañas de difamación en la provincia, bloqueo al acceso a varias páginas institucionales del territorio. La profesora María Delys, difamando y hablando de mí en todos los turnos de clases, cuestionando mi postura política, mi ética como periodista y mis conocimientos que están más que demostrados”, contó.

​Igualmente, al joven lo separaron de la Unión de Jóvenes Comunistas “porque mi forma de pensar no estaba acorde a los estatutos y principios de la organización”.

​“Lo que más siento de irme de la Universidad es dejar a mis amigos, los verdaderos que no se han alejado. A mis estudiantes, dejar de enseñarles periodismo a pesar de mi corta experiencia. Las charlas con ellos, los momentos juntos, de soñar y crear proyectos. Hablar durante horas sobre cómo ser mejores periodistas y comunicadores sociales. Siempre dije que amaba el periodismo, pero más amaba enseñarlo”, dijo Tan Estrada.

​No obstante, mantiene la esperanza de regresar al centro de estudios cuando “no sea solamente para los ‘revolucionarios’, sino para todos sin importar la ideología”.

​La Universidad de Camagüey tiene una larga tradición de expulsiones por motivos ideológicos, tanto a estudiantes como profesores. Nuestro investigador José Raúl Gallego, así como la profesora Lucila María Morales Vivar y el estudiante Eliecer Jiménez Almeida también padecieron hostigamiento, persecución y despido o expulsión injustificados.

​El Observatorio de Libertad Académica se solidariza con José Luis Tan Estrada; denuncia el proceso arbitrario al que fue sometido y condena su expulsión. Su caso demuestra la nula libertad de expresión que existe en las universidades cubanas y el total desprecio por los principios de la autonomía universitaria al plegarse a las órdenes de la policía política.